SEGURIDAD VIAL. RECOMENDACIONES BÁSICAS

Por motivos laborales es muy posible que tengas que utilizar vehículos para ir y volver del trabajo (in itinere) o realizar trayectos por carretera en tu horario de trabajo (in misión).
La principal función de la seguridad vial es reducir los accidentes y las víctimas durante la circulación.
Para ello, debes tener en cuenta unas normas básicas de seguridad tanto para conductores, peatones y ciclistas.
Debes mantener el vehículo en óptimas condiciones de funcionamiento. Recuerda pasar la ITV obligatoria o voluntariamente, ya sea por la edad del automóvil o por haber sufrido un accidente.
Para reducir los factores de riesgo relacionados con el vehículo deberás seguir las siguientes recomendaciones:
Revisa periódicamente:

  • El estado de los neumáticos.
  • El correcto funcionamiento de la dirección.
  • Posibles anomalías en la suspensión.
  • La efectividad de los frenos.
  • El buen estado del motor, transmisión y la batería.
  • El correcto funcionamiento de las luces.
  • El posible deterioro de los limpiaparabrisas.
  • El estado y funcionamiento de los cinturones de seguridad, airbag, chasis y carrocería.

Factores de riesgo relacionados con el conductor:
Aspectos Físicos:

  • La fatiga, distracciones y sueño.
  • Alcohol y drogas.
  • Enfermedades y medicamentos.

Aspectos Psicológicos:

  • El estrés, la depresión, la ansiedad.
  • Habilidades, destrezas y conocimientos.

De la misma manera, si tomas medicamentos, asegúrate de que no provocan somnolencia.
En caso contrario, no utilices el vehículo.
Evita digestiones pesadas.
Recuerda que la pesadez de estómago favorece el sueño.
Todos los ocupantes del vehículo deberán colocarse siempre el cinturón de seguridad antes de iniciar la marcha.
En caso de circular con ciclomotor o motocicleta, se debe utilizar siempre el casco reglamentario.
La espalda debe permanecer erguida, nunca curvada y debe estar apoyada contra el respaldo en toda su longitud.
Regula la distancia, altura e inclinación del asiento para acceder de una manera cómoda al volante y a los pedales.
Respeta y obedece siempre las normas del código de circulación.
Calcula la ruta y sal con tiempo, no conduzcas con prisas.
Evita el exceso de confianza.
Recíclate en el conocimiento de las nuevas normas de tráfico.
Evita la agresividad al volante.
Señaliza con suficiente antelación cualquier maniobra. Debes comprobar que los demás se han percatado de tu advertencia.
Debes descansar cada 2 horas de viaje, tomar bebidas refrescantes y comidas ligeras.
Modifica los “vicios” que has adquirido en la conducción.
Mantén la distancia de seguridad y adelanta correctamente.
Ten especial cuidado en las rotondas.
Si utilizas gafas graduadas, es recomendable que dispongas de un par de repuesto en el vehículo.
No utilices el móvil, por favor. No te distraigas.
En caso de transportar cargas:
Nunca sobrepases el Peso Máximo Autorizado del vehículo.
Reparte el peso de la carga y asegura su estabilidad.
Realiza la carga y descarga en las zonas autorizadas.
Extrema la atención con el paso de viandantes o de otros vehículos cuando realices dicha actividad.
Si utilizas cofres o maletas porta-equipajes adosadas a la motocicleta:
No los sobrecargues y procura que queden totalmente cerrados antes de iniciar la marcha.
El contenido de los mismos debe estar sujeto y anclado de modo que no se balancee durante la circulación.
Factores de riesgo relacionados con la vía y las condiciones meteorológicas:
De noche.
Con hielo.
Nieve.
Viento.
Niebla.
Sol…
En caso de niebla, lluvia o pavimento mojado deberás extremar la precaución y reducir la velocidad de conducción.
Enciende las luces, aumenta la distancia de seguridad respecto al resto de vehículos y frena de forma lenta y progresiva para que las ruedas no se deslicen sin ningún tipo de control.
Si se produce el fenómeno “aquaplaning”:

  • Suelta suavemente el acelerador.
  • Sujeta firmemente el volante.
  • No pises el freno.

Dependiendo de la época del año son obligatorias las cadenas para nieve, que deberás colocar, al menos, en una rueda motriz a cada lado del vehículo.
Es importante que adquieras cierta práctica en su montaje, sin esperar a colocarlas por primera vez cuando sea estrictamente necesario.
En caso de no disponer de cadenas, puedes considerar la posibilidad de sustituirlas por neumáticos con diseño especial para circular sobre hielo o nieve.
Si es necesario bajar del coche por avería o accidente, toma las debidas precauciones y sobre todo: ¡hazte ver!
Ponte el chaleco reflectante.
Coloca los triángulos reflectantes para advertir al resto de conductores.
Camina con ellos delante de tu cuerpo y sitúa uno de ellos a cincuenta metros por detrás del vehículo.
Si la vía es de doble sentido, pon otro cincuenta metros por delante del vehículo.
Colócalos de modo que los demás conductores puedan verlos con facilidad.
Cuando circules a pie:
Respeta las señales, semáforos y las indicaciones de los agentes de tráfico.
Ten especial cuidado en las salidas y entradas a los garajes, aunque el peatón tiene prioridad, eso no siempre se respeta.
Si no hay zonas peatonales, camina lo más cerca posible de los edificios y arcenes, siempre de frente al tráfico. 
Observa la vía de circulación antes de cruzar, comprueba visualmente cada carril y no procedas a pasar hasta que no estén parados todos los vehículos.
Extrema la precaución cuando vehículos largos (autobuses, camiones, etc.), realizan giros, ya que las ruedas traseras se cierran respecto a las ruedas delanteras y resulta fácil sufrir un atropello
Si tienes que cruzar la calzada cerca de un autobús o de un vehículo de grandes dimensiones, hazlo siempre por detrás del mismo, nunca por delante.
Mientras caminas:
Evita las distracciones en el uso de auriculares o teléfonos.
Las distracciones son una de las causas más importantes de atropellos.
Transita siempre por las vías destinadas a peatones. En caso de no existir, debes transitar por la zona más alejada del borde de la calzada.
No debes detenerte en el arcén o la calzada, ni siquiera en espera de un vehículo. Para subir a este, accede a la calzada cuando ya esté a tu altura.
Extrema tu precaución cuando las condiciones atmosféricas no sean favorables, ya que se reduce la visibilidad y aumenta el riesgo de caídas por resbalones, golpes o choques con vehículos.
Recuerda que durante la circulación nocturna es obligatorio el chaleco reflectante, desde el ocaso hasta la salida del sol en vías fuera de poblado.
Cuando circules en bicicleta:
Si existe, utiliza siempre el carril bici.
Señaliza siempre tus movimientos, sobre todo los giros a la izquierda.
Utiliza elementos reflectantes en el vestuario y la bicicleta.
Obedece la señalización de circulación.
Es recomendable circular con casco por vías urbanas, aunque no es obligatorio (solamente para menores de 16 años).
En caso de escasa visibilidad, extrema tu precaución.
No cometas imprudencias.

Última modificación: sábado, 18 de abril de 2020, 19:42